La Sociedad Uruguaya de Dermatología lanzó su campaña “Quererte es cuidarte, el cáncer de piel es el cáncer que tú puedes ver”.
La iniciativa busca prevenir y detectar de manera temprana al cáncer de mayor incidencia en Uruguay, algo que no es común en la región. “Nuestro país sufre un aumento de casos nuevos, es por lejos el que posee el mayor número y la mortalidad también ha aumentado. Es alarmante que esto suceda cuando es un cáncer que puede ser diagnosticado en etapas tempranas y ser curado”, dijo Alejandra Larre Borges, miembro de la sociedad de Dermatología y co coordinadora de la campaña de cáncer de piel.
Los melanomas son los más conocidos porque antes eran casos mortales, aunque un cáncer de piel no melanoma puede ser mortal si no es detectado a tiempo. El 90% de los casos son melanomas o carcinomas (basocelular y espinocelular). “Este tipo de cáncer tiene mediana incidencia y también provoca muertes, la mitad de las muertes son causadas por los carcinomas”, explicó Larre Borges.
La forma de prevenir el cáncer de piel es cuidándose de la exposición al sol por la radiación UV. Además, uno de los ejes para la campaña de este año es evitar camas solares, algo que se considera clave y a pesar de que existen muchas maneras de protegerse de la exposición al sol, ya sea con el uso de ropa adecuada y de protector solar, Larre Borges aclaró que la mejor forma y la más barata es “la sombra”. “Hay que cuidar a los niños especialmente, cuidar a los adultos, yo les digo siempre que si quieren vivir mucho, entonces, tienen que cuidarse ahora para el futuro. La radiación que tomás ahora va a prevenir o va a hacer que tengas cáncer de piel ¿Cuándo? En 15 o 20 años. Porque no es el sol que tomé ahora el que produce cáncer de piel”, afirmó la dermatóloga.
Si el cáncer de piel es detectado a tiempo, incluso los melanomas, con nuevas terapéuticas puede llegar a curarse de forma definitiva. Aunque muchas veces quedan secuelas y lesiones de por vida.
Larre Borges explicó que todos podemos realizarnos un autoexamen mensual. Esto es, básicamente, mirar nuestro cuerpo o el de nuestros hijos y solo con eso se puede detectar, porque a diferencia de cualquier otro cáncer, el de piel se puede ver y así lograr un diagnóstico temprano. En Uruguay, la detección tardía está asociada a las poblaciones más vulnerables. Las lesiones pueden ser nuevas, también puede ser una que cambie, por ejemplo, un lunar o una lesión rara.